El proceso para cubrir las plazas de Policía Local permitirá incorporar a 18 nuevos agentes en 2025
La Concejalía de Personal del Ayuntamiento de Burgos ha aprobado un decreto por el que determina la anulación de la convocatoria del proceso selectivo para cubrir 10 plazas de agentes de la Policía Local en el año 2023, dado que lo ajustado de los plazos previstos por el anterior equipo de Gobierno imposibilitó llegar a tiempo para culminar esas oposiciones.
Con la firma de este decreto, el Ayuntamiento también acuerda la devolución de oficio de las tasas que abonaron los 500 inscritos en ese último proceso y solicita a la Junta de Castilla y León que ponga en marcha la convocatoria de 2024 con el fin de incorporar las 8 plazas previstas para este ejercicio y las 10 que no se cubrieron el año pasado y que correspondían a la convocatoria de 2022.
De este modo, el actual equipo de Gobierno del PP y de Vox resuelve un problema ‘heredado’ y activa el procedimiento de una nueva convocatoria a fin de dotar a la Policía Local de Burgos del número de efectivos necesarios en una plantilla que en este momento no está cubierta al cien por cien por las jubilaciones que se ha registrado en los últimos años.
La concejala de Personal, Yolanda Barriuso, ha lamentado que el anterior gobierno local fuera “incapaz” de sacar adelante en tiempo las oposiciones que correspondían al año 2022 y ha criticado que el PSOE realizara en el último momento (pocos días después de las elecciones de mayo) la aprobación de la convocatoria para “intentar parecer que habían hecho algo cuando ya no había tiempo”.
Además, la solución ahora adoptada -en la que el Ayuntamiento pone en manos de la Junta la convocatoria y la gestión de las oposiciones de 2024 supone un ahorro económico para las arcas municipales al no tener que realizar los cuatro ejercicios que establece este proceso, coste que se eleva a unos 50.000 euros.
También implica disminuir la carga de trabajo del área de Personal, centrado en numerosos procesos de oposiciones y de estabilización.
Tal y como establece el convenio suscrito en 2020 entre la Consejería de Fomento y los ayuntamientos de la Comunidad Autónoma, las corporaciones locales asumían la convocatoria de las oposiciones de agentes de policía local de los años 2022 y 2023 y el Gobierno regional de los procesos de 2021 y 2024.
En el caso del Ayuntamiento de Burgos, el anterior equipo de Gobierno no publicó la convocatoria de 2022 y esperó al 6 de junio de 2023 para convocar las oposiciones de esas 10 plazas vacantes.
Las bases de esa convocatoria salieron publicadas el 7 de agosto de 2023 en el BOP y el 17 de agosto de 2023 en el BOCYL. Un día después, es decir el 18 de agosto, la Agencia regional de Protección Civil envió un escrito al Ayuntamiento de Burgos para indicarle que la primera de las pruebas de esas oposiciones debía realizarse el 20 de octubre de 2023.
Proceso que ya era imposible llevar a cabo porque la publicación en el BOE de la resolución por la que se abría el plazo de presentación de instancias se hizo el 31 de octubre de 2023.
“El inicio y culminación de un proceso selectivo como éste lleva al menos un plazo de un año con lo cual los tiempos marcados por el PSOE en la anterior legislatura, al iniciar la convocatoria en junio de 2023, hacían imposible cumplir el calendario”, ha asegurado la concejala de Personal, Yolanda Barriuso.
La edil del PP también ha anunciado que la anulación de la convocatoria y la devolución de las tasas a las personas que se inscribieron en esas oposiciones de 2023 no generará problemas dado que no se llegó a publicar la relación de admitidos y excluidos y no se realizó ejercicio alguno.
Por su parte, el concejal de Seguridad, Ignacio Peña, ha indicado que la medida adoptada por el equipo de Gobierno, al pedir que sea la Junta quien realice la convocatoria, es lo más sensato.
“Era una locura desaprovechar esta oportunidad que ofrece la administración regional cuando las ventajas que conlleva si lo asume el Ayuntamiento son mínimas”, ha señalado.
